2013 Felicidades!


Feliz Navidad!!!


Tuyo Mío Nuestro

La conocí un día nublado, la tarde se había ido, mucho antes que de costumbre, era de noche, yo venía cansado de un día largo, coincidimos en el mismo viaje, y casi sin darnos cuenta, estábamos charlando, nos conocíamos de antes, pero era otra ella y otro yo, encontramos nuestros puntos en común y las divertidas diferencias, jugamos a caminar por el sol y por la lluvia.

Los días nos fueron acercando, las palabras se siguieron encontrando junto a las risas, un día en su casa, me llamo la atención un gran cofre, con una pesada cadena que mantenía perfectamente cerrado.

-¿Qué hay ahí? pregunté.
-No puedo decírtelo..., respondió ella.

La intriga me carcomía, pero las respuestas más importantes son huérfanas de preguntas, por lo que preferí callar y no volver a hablar del tema, el tiempo pasó y cada vez que veía el cofre, moría de ganas de saber que escondía.

Un día cuando terminamos de comer y la casa estaba en silencio, me dio una llave y me dijo, hoy mi secreto, es el tuyo, sin poder creerlo, me acerqué al cofre, el candado cedió rápidamente ante la llave y las cadenas hicieron un ruido seco al golpear el suelo, iba abriendo la tapa, cuando una luz cálida se asomó, podría haberme asustado, pero en cambio me invitaba a ver que se escondía, la tapa chocó contra la pared, al principió me encandilo, pero luego la luz desapareció, dejando a la vista, un par de pequeñas alas, las tome delicadamente, eran extremadamente suaves, la miré sosteniéndolas en mis manos.

-Sé que es difícil de entender, pero soy un hada...

Aún sin poderlo creer me acerqué y se las di, ella estiró el brazo y las tocó, instantáneamente estaban en su espalda, y poco después ella volaba, sobre mí.

Ahora es nuestro secreto me dijo, sentada sobre el placard.

A lo que respondí. -Gracias por compartirlo conmigo, pero no puedo ser parte de tu secreto, no puedo aceptar que vueles entre estas cuatro paredes, quiero que el cielo sea tuyo y yo estar ahí para verte tocar la luna.

No sirve de nada hacer una copia de la llave del candado, 
lo que hay que hacer, es romper las cadenas.

Informe meteorológico

Un día gane un premio y me sentí realizado,
al otro, perdí lo que había jurado conservar,
y no pude estar mas que triste,
cuando sin buscarlo me robaron una sonrisa.

Cuando fui el hombre más feliz de la vida,
tuve abrazar a un amigo en su peor momento,
cuando había jurado no irme nunca,
tuve que abandonar todo y partir.

De la nada me construí una vida,
y de la tierra levante una casa,
que después se lleno de risas y besos,
y el cielo otra vez fue mío.

No soy un ganador por haber ganado un día,
ni un perdedor por haber perdido al otro,
no soy el mejor por haber vencido,
ni una basura por haber sido derrotado.

Sin importar cuanto brillen las estrellas hoy,
sin importar cuan obscura sea la noche mañana,
caminaré por la sombra cuando la vida me lo pida
y me cruzaré al sol, siempre que se distraiga.

No tengo nada para darte, solo puedo prometerte,
que siempre voy a buscar la manera de hacerte sonreír,
y sino no lo puedo hacer...
abrazarte y caminar bajo lluvia, juntos.

XII

Un maniquí frente al espejo,
agradeció:
a sus pies:
por haber caminado siempre hacía adelante, sin miedo a lo que pueda venir.
a sus piernas:
por mantenerlo de pie, cuando no quedaba nada por que hacerlo.
a su cuerpo:
por que cuando dolió hasta las entrañas y sentía que la espalda se iba a partir, nunca haber flaqueado
a su corazón:
por la honestidad, hasta cuando lastima.
a sus brazos:
por nunca haber ahorrado un abrazo.
a su cuello:
por doblarse por en un hombro amigo, pero nunca por la fuerza.
a su sonrisa:
por ser el motor de todo buen día.
a su nariz:
por saber cuando algo no estaba bien, y ya no pertenecía ahí
a sus ojos:
por ver a través de las máscaras.
a sus oídos:
por haber encontrado la canción para cada hora de la vida.
a su voz:
por conocer la palabra gracias.
a su mente:
por saber que uno se define por sus acciones.

frente al espejo ya no había maniquí alguno, había nacido una persona

Al león

Puedo sentir el hielo de tu mirada, aunque no te vea,
sé que vendrás por mí, estas pensando en el triunfo,
te relames las garras, esta ya es tu jungla.

Sin moverme espero tu ataque, no por estar paralizado,
sino por que no respondo a tu odio,
no pertenezco a los sueños de tus fauces.

No temo, no por saber que puedo ganar,
sino por que aunque pierda, aunque desaparezca
sabré que nunca deje a tus nubes, tapar mi cielo.

Las tormentas pasan, la noche se hace día,
los huracanes terminan con una brisa,
tus rugidos acaban, donde empiezan las palabras.

Reciclaje


Tu alegría no puede ser mi tristeza, mi corazón no se puede doblegar por tu risa,
tengo que convertir cada vez que me sienta vencido a fuerzas para vivir,
que tu No, sea el motor de mis Si
que lo que no pasó, sea la inspiración para lo que pase,
en mi residen las fuerzas, en mis músculos las de levantarme,
en mi boca las de decirte "gracias",
y en mis ojos las de encontrar el camino que hay detrás tuyo.

Después de la noche, el amanecer.

Beneficios de la luz

Para todos brilla igual, pero algunos prefieren cerrar las cortinas, otros prefieren abrir las ventanas para llene la casa de vida, algunos prefieren iluminar todos los lugares por igual, otros prefieren navegar en un libro a la luz de velador, algunos le gusta dormir a obscuras, a otros recordando su infancia les gusta dormir abrazados por la luz.

Pero debo decir que la mejor forma de disfrutar de la luz es en penumbras, cuando ella se recorta única ante nuestros ojos, cuando es lo único ante nuestros ojos, cuando hace de un cuarto común, un lugar único donde  uno podría estar horas e incluso días, cuando ese momento mágico hace de un tema música el mejor tema de todos, cuando hace de un segundo, una vida.

Todo en compañía de una lucecita....

El antiguo estudio del escriba egipcio

Mucho se ha hablado de las almas gemelas, uno de los escritos más interesantes es la historia de Dadel y Naits, que data del Egipto antiguo.  En este papiro de un escriba anónimo, es el estudio sobre el encuentro de dos personas que presentaban un extraña característica, compartir solo un alma, normalmente cada persona tiene un alma, en muy contadas ocasiones, una persona nace con media alma, en su vida diaria no notará la diferencia con el resto de personas, solo sentirá en su corazón que en este mundo existe su otra mitad, como todos creen, solo que en este caso es verdad, la otra mitad de su alma, esta dando vueltas en la tierra.

En verdad es la misma alma que desde el comienzo del universo esta dividida, según el escriba que estudio el caso de Dadel y Naits, el alma que compartían tiene que haber sido tomada por dos cuerpos en el mismo momento, quizás la primera vez fue un pájaro y una nube, y tal vez este fue el primero que aprendió a volar para estar siempre cerca de su otra parte, de esa parte que lo completa, de su alma gemela.

Pocas descripciones quedan de ellos, solo se dice que Dadel era excepcionalmente bella, sus ojos brillaban como dos estrellas y su sonrisa era simplemente de otro mundo, Naits podía estar horas mirándola.  Según ellos mismos relataron al escriba, ni bien empezaron a hablar parecía que hacía años que se conocían, que al compartir vieron que tenían los mismos gustos y pensamientos, no había manera que eso fuese posible que dos personas fueran tan iguales, tenía que haber algo más, eso fue lo que despertó el interés del escriba, y lo llevo a investigar, las almas gemelas y luego a descubrir el alma que es dos a la vez y que cada vez que vuelve a la tierra, vuelve a encontrarse y a unirse, noto que no pueden estar separados mucho tiempo después de encontrarse, una angustia los invade, una presión en el pecho que no los deja respirar, es normal, una vez unida el alma no puede separarse, tienen que estar juntos, siempre.  El alma por haber estado separada tanto tiempo, una vez que se encuentra, hace que cada uno viva en el pensamiento del otro, son hilos invisibles que han unido al alma nuevamente, es la energía que produce la unión que constantemente recorre los cuerpos, como así cuando están juntos, el mundo a su alrededor desaparece, el alma en esos momentos es una, su unión es completa, por esa razón hace con su luz que el entorno sea eclipsado, el escriba estaba intrigado y les pregunto si se amaban y le respondieron que era sensación tan fuerte, tan hermosa, tan gigante que hacía que la palabra amor pareciera pequeña, este quedó sin palabras, y anotó a un costado del estudio, evidentemente no es un amor terrenal, es un amor que viene desde la eternidad, por lo cual es más grande y fuerte en cada vida, se debería definir una nueva palabra para estos casos, se podría decir que cada persona se convierte en el todo de la otra.

Sacando el estudio del escriba no hay mucha más información sobre este suceso, que todas las vidas vuelve a repetirse, se supone que en este momento las dos mitades, el pájaro y la nube, se han encontrado nuevamente, completando la única alma del universo que vive en dos cuerpos, la historia de amor más maravillosa que recorre la tierra desde los comienzos de la misma, hasta hoy.

El Camino del Bosque

Una joven y bella mercader recorrería varias veces al mes el camino real que llevaba desde la ciudad a su pueblo, como su familia lo había hecho durante generaciones, tenía una sonrisa increíble y una gran inteligencia, en poco tiempo había acrecentado el negocio familiar, haciendo al pueblo y a los suyos muy orgullosos de contarla entre sus amigos, familia o tan solo por conocerla.

Estaba volviendo de la ciudad cuando vio un puesto militar cruzando el camino, ella se detuvo y uno de los soldados enfundado en una magullada armadura se acercó, hablando con un extraño acento le dijo:
-Señorita el camino esta cerrado, un pueblo cerca de aquí se ha levantado en contra del rey, estamos por comenzar el asedio, le recomendaría tomar otro camino.
-Gracias, pero siempre he recorrido el mismo camino, podría indicarme otro...
El soldado titubeo, miró al resto, que rápidamente se ocuparon en algo fingiendo no estar mirando la situación.
-Señorita, si hay uno, pero... no se suele usar, es peligroso y muy fácil de perderse, aún así es el único camino que puede tomar, aquel camino angosto la llevará, está cayendo la noche, le diría que espere a la mañana.
-Le agradezco soldado sus indicaciones, tomaré las medidas necesarias.
Los soldados se quedaron mirando como la joven partía con los últimos rayos de sol.

El estrecho camino estaba ladeado por árboles grandes y frondosos, cuyas ramas se avanzaban sobre el mismo, como pérgolas naturales, más adelante pudo ver como dos árboles cruzaban sus ramas formando una entrada, como si fuera catedral, adentro ya las últimas gotas de luz no habían sabido llegar, a un costado el fuego llamó su atención, era una pequeña hoguera donde un había una persona sentada, se acercó y vio que era un hombre de unos treinta años, con ropa de campesino y la barba de unos días.

Ella detuvo su carro, él la miro y dijo:
-¿Va a cruzar?
-Si...
-No, se lo recomiendo, esta muy obscuro, no quisiera incomodarla, puedo invitarla a comer algo, no tengo mucho, solo unas papas que estoy asando, pero le prometo que soy el mejor asador de papas de la región.
Ella rió, él continuó.
-Dama de la sonrisa más bella, si haría el favor de cenar conmigo y esperar juntos el amanecer, con las primeras luces del día cruzaríamos el bosque, dicen que el camino es difícil y estaría muy agradecido de tener un lugar en su carro para mis palas y de tener un lugar en el asiento a su lado.
La mercader lo miró y vió, así con media papa clavada en un palito y sintió la sinceridad en sus palabras, ató el caballo, él le dejó lugar en su manta y le convido otro palito con un papa clavada, para beber solo tenía una bota, llena de agua, había olvidado llenarla y tuvo que hacerlo en un río cercano.  Comieron y hablaron, al principio, muy serios y de apoco fueron entrando en confianza, hacía la madrugada no paraban de reír, compartían historias, sueños y fantasías.

El relinchar del caballo los despertó, no sabían cuando se habían dormido, sus cabezas habían quedado enfrentadas y al abrir los ojos, se miraron uno al otro, en una mirada eterna, que después en súbito ataque de vergüenza intentaron disimular, incorporándose rápidamente. Es ahora de partir dijo ella, él asintió mientras tomaba sus cosas y apagaba lo que restaba de fuego, poco después se adentraron en el bosque, la luz era escasa, el camino por momentos era pantanoso y las ramas se cruzaban obligando a bajar la cabeza más de una vez.  El viaje transcurría tranquilo y ellos seguían hablando, como si fueran conocidos de toda la vida, cuando el carro agarró un pozo, sacudiéndose violentamente, ella resbaló y estaba por caer del carro cuando sintió la mano de él que la tomó fuerte, un poco más y habría caído sobre unas rocas, pero después sintió como el campesino la tenía agarrada fuerte y supo que no caería, volvió a su lugar ella le agradeció y él respondió no hay que, ambos no podían dejar de mirarse, luego de unos segundos siguieron viaje, cuando escucharon un trueno y luego la lluvia, era fuerte y hacía difícil ver por donde iban así que decidieron acampar hasta que pare, al caballo no parecía molestarle la lluvia, así que colgaron una tela del carro, improvisando una tienda, se había levantado viento y con el agua, estaba haciendo mucho frío, ambos comenzaron a temblar, tomaron todas las telas que había y se cubrieron con ellas mientras se abrazaban fuerte, el tiempo no cambiaba, pero en ellos el frío y el temblor se habían ido.  Cuando amainó siguieron viaje, las risas rodeaban al carro y pintaban el obscuro bosque de colores, el camino con tanta lluvia se había hecho más difícil, y en una loma el caballo no hacía buena tracción para tirar el carro, ambos bajaron a empujar, cuando el caballo patino y el carro retrocedió de golpe, como era una curva, ambos quedaron con su espalda contra un árbol y aguantando el peso del carro con sus brazos, el peso era mucho, cuando ella comenzó a gritarle al caballo, al caballo que había sido su compañero de miles de viajes y desde muy joven, este pareció entenderla e hizo más fuerza que nunca, mientras ellos demostrando una fuerza que no sabían que tenían volvieron a poner el carro en el camino y despacito lograron pasar la lomada, estaban exhaustos, pero felices habían trabajado juntos y habían salido, se habían salvado, después de un abrazo sin tiempo siguieron viaje.  Compartieron la historia de sus vidas, sus miedos y sus anhelos, allá a lo lejos se podía ver más luz, parecía falta poco para salir del bosque, cuando el caballo empujó una rama, y esta desengancho otra que salió como látigo impactando en el brazo del campesino, la sangre comenzó a correr rápidamente, él no había llegado a reaccionar, cuando vio que ella ya había mojado un trapo y estaba limpiando su herida, lo miro con su sonrisa gigante y él hasta se sintió agradecido a la rama, esa sonrisa valía mucho, sintió como ataba fuerte la tela y como la sangre había vuelto a su cause, él le agradeció y ella siempre con su sonrisa hermosa le dijo que no fue nada, y él también sonrió, la luz entraba en el bosque, era el mejor cuadro nunca pintado, ellos y sus sonrisas.  Siguieron adelante y poco tiempo después el bosque había terminado, allá adelante estaba el pueblo, ella le pregunto y ahora... y él le respondió:
-Ahora llevaremos por siempre el camino del bosque tatuado en nuestro corazón, no importa que hagamos siempre estará ahí, sabemos cuando el otro este por caer, ahí estaremos para estrechar la mano y sostenerlo, que cuando haga frío o temblemos, siempre tendremos los brazos del otro para refugiarnos, para encontrar calor, que cuando el mundo nos aplaste, cuando sintamos que no podemos más, estamos juntos para empujar, que juntos podemos lo imposible, que cuando estemos heridos, estará el otro para curarnos.  Superamos una prueba, pero no las prueba de las que habla el hombre, las que se puede fracasar o tener éxito, en las que se puede ganar o perder, esas que no tienen que ver con la vida, son construcciones humanas, que muchas veces se ven superadas por la vida, esta no entiende de esas cosas, solo es, la pruebas de la vida son para aprender, son para el espíritu, para aprender sobre nosotros y sobre el mundo, pero si quisiéramos hablar de un triunfo, en la vida solo triunfa quién aprende a disfrutar de cada paso, de cada instante, sabiendo que es único, que la felicidad está ahí, en cada tramo del camino.
Se miraron y se fundieron en beso.

Princesa

"...Cruzaría los ríos, todos los del mundo a pie, nadaría los océanos, buscaría en  muelle.

Recorrería cada camino, ruta y sendero, hasta dibujar los míos y llegar  hasta  donde nadie a llegado.

Observaría cada estrella, la luna y el sol, hasta conocer los secretos del universo.

Viviría cada vida, cada sueño y cada pensamiento.

Tan solo, por darte el más hermoso de los besos..."